Voy a decirlo de un tirón: No me gusta levantarme temprano.
Aunque no se si no me gusta por que es temprano en sí o porque amo demasiado dormir. Siempre me ha gustado el desconecte, el descanso, y hasta la evasión que hay en eso de dormir, y por mucho tiempo fui un ser nocturno, que "rendí" mas actividades en la tarde o noche que por las mañanas. Y ser de esa manera es terrible, porque tengo un trabajo en el que entro muy temprano. Y he tenido que aprender a despertar y levantarme temprano.
Un buen día salí de casa con el tiempo justo para llegar al trabajo, es decir; me levanté lo mas tarde que pude y entre al estacionamiento de la empresa a la par con un compañero de trabajo y al bajarnos del carro me dijo buenos días con un tono bastante contento, !Buenos días Ana ¿Cómo estás?! ¿Ya lista para tu día de trabajo?! Todo frescura y brillo matinal.
Leíste bien: Frescura y brillo matinal. Sonriendo pues.
Me di cuenta de que yo todavía iba de cara lavada con el cabello estilando (muy común en mi),lo que le contesté a pesar de que tal vez se considerara descortés pero se lo pregunté directamente: Buenos días. Bien ¿Y tú? ¿De dónde tanta alegría? Ambos nos bajamos termo de café en mano, ambos llegamos minutos antes de entrar a trabajar, ambos estamos listos pero no, contrario a mi ceño somnoliento tu pareces mucho mas radiante que yo no me lo tomes a mal, no es que vengo de malas a trabajar, vengo dispuesta y con gusto, simplemente esperé hasta que no me quedara de otra para despertar, es decir, en la hora límite, es que la verdad no soy una persona muy de las mañanas, ¿Qué es eso de tener que entrar a trabajar a las 6.00 de la madrugada? No es queja, le dije.
Y nos reímos. Me mencionó todas sus razones para levantarse temprano, me dijo más, me platicó que en casa tampoco son muy de las maña y que al único que gusta de levantarse realmente temprano (antes del amanecer) es a él y que en eso siente que se parece a su abuelo que era igual, cuando era niño que pasaba temporadas en su casa se despertaba antes que todos, preparaba café o algo y luego se paseaba por la casa canturreando algo parecido a "ya despierten, ya está el café" El también era una persona "de las mañanas". Es una buena historia y esas son muy buenas razones, pero no me convences le dije dándole un sorbo a mi café antes de entrar a la oficina y ponerme a trabajar.
No me gusta despertarme temprano pero lo hago.
Día 17: Escribe acerca de algo que no te gusta hacer
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